Cuando comenzamos a cocrear conscientemente, el primer tiempo nos sentimos fantásticos, poderosos. Queremos crear con todas nuestras fuerzas de que esto que parece ser magia es verdad, y ponemos toda nuestra energía en lograrlo. Obviamente no le decimos a mucha gente, después de todo igual es medio raro creer que cada uno puede crear lo que sea…va completamente en contra de todo lo que nos han enseñado.
Sin embargo a penas vivimos un contraste, solemos relativizar todo y dudamos de si en realidad será cierto o es una locura más del new age…. Y entonces nos pillamos pensando en lo que no queremos y hay culpa porque creemos que echamos a perder todo lo que hasta ahí habíamos logrado elevando la vibración y que de nuevo estamos en cero.
Tenemos que entender lo siguiente: un pensamiento negativo, tiene mucho menos fuerza que uno positivo. Son necesarios miles de miles de segundos pensando en algo malo para que finalmente se manifieste. Pese a ello debemos tener cuidado porque cada vez que pensamos en lo que no queremos estamos activando ese pensamiento y traemos a nuestro presente todas y cada una de las veces que pensamos en ello.
Lo mismo pasa al activar un pensamiento positivo…la pena es que normalmente no pensamos en positivo y nos cuesta mucho más activar ese pensamiento. A veces pensamos que debemos pensar positivo, y que eso implica siempre pensar en algo bueno, y sin embargo eso equivale a tener una capa muy grande de miedo cubierto de un pensamiento positivo, y adivinen lo que se manifiesta: Miedo. ¿Porqué? Porque la señal que estamos emitiendo la mayor parte del tiempo proviene de la emoción y por más que intentemos pensar en positivo, la emoción es de miedo. El elevar la vibrción es como estar en un ascensor. No podemos estar en el subterráneo e imaginar que estamos en el Pent House, tampoco podemos subir al último piso sin pasar por los demás pisos previamente, tenemos que subir uno a uno, pasando por todos.
LA CLAVE PARA DESACTIVAR UN PENSAMIENTO RECURRENTE ES PENSAR EN OTRA COSA. Es muy difícil decir: -no voy a pensar en el dividendo atrasado, no voy a pensar en el dividendo atrasado -…y cada vez que lo haces se aprieta el estómago, y activamos el pensamiento. En lugar de ello, debemos buscar otra cosa en que pensar, como por ejemplo un problema que resolver en la oficina que aunque no es algo muy bueno, es mejor porque nos preocupa menos. Es difícil si estamos con ese nivel de angustia poder pasar al estado de euforia pensando en la maravillosa casa que vas a tener porque te las vas a cocrear.
Cuando estamos vibrando muy bajo, debemos ir elevando la vibración lentamente. Lo mejor es dejar lo que estábamos haciendo y comenzar a hacer otra cosa que acapare nuestra atención como ver televisión, dormir una siesta o leer un muy buen libro. Una vez que ya no estemos en medio del remolino de pensamientos podemos comenzar a activar otros pensamientos más placenteros.
Un ejercicio muy poderoso que nos va a permitir elevar nuestra vibración es el ejercicio entregado por Abraham a través de Esther Hicks en el Cuaderno de Trabajo de Pide y se te Dará:
Ascender por la Escala Emocional
Cuándo debes utilizar este proceso
• Cuando te sientas mal y te cueste sentirte bien.
• Cuando te haya ocurrido algo a ti o a una persona que quieres que te ha causado un fuerte impacto (has perdido a un ser querido, tu amante te ha abandonado, tu perro ha muerto atropellado, etcétera).
• Cuando te enfrentes a una crisis.
• Cuando te hayan diagnosticado una enfermedad grave.
• Cuando los médicos hayan diagnosticado a una persona que quieres una enfermedad grave.
• Cuando tu hijo, u otro ser querido, experimente un trauma o una crisis.
Así pues, el contraste de tu experiencia vital te ha ayudado a identificar tus preferencias y deseos. Y al margen de que los manifiestes en voz alta o no, la Fuente ha escuchado todas tus preferencias y deseos —por importantes o insignificantes que parezcan— y ha respondido a ellos. Y el gerente, llamado Ley de Atracción, te ha proporcionado las circunstancias, los acontecimientos, otras personas y toda suerte de cosas para contribuir al cumplimiento de tus deseos. Dicho de otro modo, has formulado unas peticiones y se te han concedido, pero ahora debes permitir que fluyan hacia tu experiencia,
Ten presente que no existe una Fuente No Física de oscuridad, enfermedad, confusión ni maldad. Existe tan sólo la Corriente de Bienestar, que fluye hacia ti en todo momento. Y a me-nos que ofrezcas algún tipo de resistencia, eres el receptor de ella, y tus emociones te ayudan a comprender en qué medida permites o impides que fluya hacia ti esa Corriente. Dicho de otro modo, cuanto mejor te sientes, menos resistencia ofreces; cuanto peor te sientes, más resistencia ofreces.
El proceso de «Ascender por la Escala Emocional» te ayudará, al margen de la situación en la que te halles, al margen de lo que estés creando y al margen de cómo te sientas, a reducir tu estado de resistencia y, por ende, a mejorar tu estado de «permitir», y toda sensación de alivio te indicará en qué medida te estás liberando de tu resistencia.
Deseamos ayudarte a comprender que la Creación Deliberada consiste en alcanzar deliberadamente un estado emocional. Por ejemplo:
• Cuando no tienes suficiente dinero, deseas más. Pero queremos que entiendas que la distancia que recorrerás no es la
distancia entre tener poco dinero y mucho dinero, sino la que existe entre un sentimiento de inseguridad y un sentimiento de seguridad. Cuando practiques el pensamiento que haga que te sientas sistemáticamente más seguro, el dinero fluirá hacia tu experiencia.
• Cuando estás enfermo, deseas ponerte bien, pero la distancia que recorres no es de la enfermedad a la salud, sino del temor a la confianza. Cuando practiques los pensamientos que hagan que te sientas más confiado, la mejoría física fluirá hacia tu experiencia.
• Cuando no tienes pareja y deseas encontrarla, la distancia que recorres es desde la sensación de soledad a la sensación de alegría o satisfacción. Cuando practiques los pensamientos que hagan que te sientas alegre o expectante, tu pareja perfecta fluirá hacia tu experiencia.
Quizá digas: «deseo un coche nuevo», pero el Universo oye: No me siento satisfecho con el coche que tengo. Me siento avergonzado del coche que tengo. Me disgusta no tener un coche mejor. Envidio a mi vecino porque tiene un coche mejor que el mío. Me enfurece no poder comprarme un coche mejor.
Quizá digas: «deseo ponerme bien», pero el Universo oye: Mi cuerpo me preocupa. Me siento decepcionado conmigo mismo. Me preocupa mi salud. Temo sufrir una mala experiencia como la que tuvo mi madre. Estoy enojado conmigo mismo por no haberme cuidado más.
Quizá digas: «deseo encontrar otro trabajo», pero el Universo oye: Estoy furioso porque mi jefe no reconoce mis méritos. Me siento aburrido.
Me siento insatisfecho con mi sueldo.
Me irrita no lograr que comprendan mi situación.
Me siento agobiado, tengo demasiadas cosas que hacer.
Deseáis todo lo que deseáis porque creéis que si lo conseguís os sentiréis mejor. Cuando hayas logrado identificar consciente-mente tu actual estado de ánimo, comprenderás más fácilmente si eliges pensamientos que te aproximan a tu anhelado destino o te alejan de él. Si te fijas como meta mejorar tu estado de ánimo, no tardarás en obtener todo cuanto deseas.
Te ofrecemos una lista de emociones básicas, comenzando con las que contienen una menor resistencia, hasta llegar a las que contienen una mayor resistencia.
Cuando distintas emociones poseen vibraciones semejantes, las indicamos en la misma línea. Estas emociones abarcan desde el extremo de permitir que tu Fuente de Energía fluya plenamente a través de ti, hasta el de impedirlo enérgicamente, y están indicadas con palabras como «Poder Personal» o «Alegría», en un extremo de la escala, hasta «Depresión» o «Impotencia», en el otro extremo de la escala.
Las palabras o calificativos que se asignan a estas emociones no son del todo rigurosos porque las personas sienten las emociones de distinta forma, aunque utilicen las mismas palabras. No obstante, el Universo no responde a tus palabras, sino a las vibraciones que emites, que van siempre y rigurosamente acompaña-das por tus emociones.
Por consiguiente, en este proceso no es esencial hallar la palabra perfecta que describa cómo te sientes, pero es importante que sientas la emoción, y más importante aún que encuentres la forma de mejorar esa sensación. Dicho de otro modo, este juego consiste en describir pensamientos que te proporcionen una sensación de alivio.
Ésta es una escala de tus emociones básicas:
1. Alegría/Conocimiento /Poder Personal /Libertad /Amor
/Apreciación
2. Pasión.
3. Entusiasmo / Ilusión / Felicidad
4. Expectativas Positivas/Creencia
5. Optimismo
6. Esperanza
7. Satisfacción
8. Aburrimiento
9. Pesimismo
10. Frustración / Irritación / Impaciencia
11. Agobio
12. Decepción
13. Dudas
14. Inquietud
15. Culpabilidad
16. Desánimo
17. Ira
18. Venganza
19. Odio/Rabia
20. Celos
21. Inseguridad / Remordimientos / Falta de autoestima
22. Temor/Desconsuelo /Depresión /Desesperación /Impotencia
Así es como debes practicar este poderoso proceso:
Cuando seas consciente de que experimentas una intensa emoción negativa, trata de identificarla. Piensa conscientemente en lo que te preocupa hasta lograr identificar la emoción que experimentas.
Teniendo en cuenta los dos extremos de esta escala emocional, pregúntate: « ¿Me siento poderoso o impotente?» Aunque es posible que no sientas ninguna de esas dos emociones con exactitud, te darás cuenta de hacia qué extremo de la escala se inclina tu estado de ánimo actual. Así pues, siguiendo este ejemplo, si tu respuesta es «impotente», reduce la gama emocional que contemplas y pregúntate: « ¿Siento impotencia o frustración?» Suponiendo que sigas sintiéndote impotente, reduce aún más la gama emocional. « ¿Siento impotencia o inquietud?» A medida que pro-sigas (no hay un sistema correcto o incorrecto de practicar este ejercicio), conseguirás identificar con exactitud cómo te sientes con respecto a la situación en cuestión.
Cuando hayas localizado el lugar que ocupas en la escala emocional, tu tarea consistirá en encontrar pensamientos que te proporcionen una ligera sensación de alivio de la emoción que experimentas.
Te recomendamos que expreses en voz alta o escribas en un papel tus pensamientos, con el fin de interpretar con mayor rigor cómo te sientes. A medida que pronuncies frases con la deliberada intención de inducir una emoción que te proporcione una ligera sensación de alivio, comenzarás a liberarte de tu resistencia y ascenderás por la escala vibratoria hasta alcanzar una sensación mucho más placentera. Ten presente que cuando tu estado de ánimo mejora te liberas de tu resistencia, y cuando te liberas de tu resistencia alcanzas un mayor grado de «permitir» que lo que deseas fluya hacia ti.
Así pues, mediante la escala emocional y comenzando por la situación en que te hallas en estos momentos, contempla la emoción que crees que mejor describe lo que sientes y trata de hallar las palabras que te conduzcan hacia un estado de ánimo emocional ligeramente menos resistente.
Por ejemplo, una mujer se hallaba en un estado de tremenda resistencia y dolor debido a la muerte de su padre. Aunque el hombre había estado gravemente enfermo y su muerte era previsible, cuando ésta se produjo la mujer cayó en una profunda depresión. Se sentía impotente y abatida porque centraba su atención en la irremediable muerte de su padre.
Durante los días anteriores a su muerte, la mujer apenas abandonó la cabecera de su lecho, pero durante uno de los escasos momentos en que no se hallaba a su lado su padre se sumió en un estado de inconsciencia y no volvió a recuperarla antes de morir. Cuando la mujer pensaba en que no había estado a su lado para mantener una última conversación con él, sentía que la invadían unos angustiosos pensamientos de culpabilidad. Y aunque no reconoció conscientemente la leve mejoría que registró su sentimiento de culpabilidad, lo cierto es que constituyó una transición vibratoria muy importante para ella. Posteriormente, la mujer pasó a un estado de intensa ira. Sus pensamientos se centraron en la mujer que había permanecido junto a su padre cuando éste cayó en un estado de inconsciencia, y sintió rabia de que esa mujer le hubiera administrado una elevada dosis de medicación (con el propósito de aliviar sus sufrimientos), y la culpó por haberle impedido sostener una última conversación con su padre.
En aquellos momentos la mujer no se percató de que sus remordimientos y sentimientos de rabia, ira y culpabilidad constituían una decidida mejoría con respecto a su estado vibratorio de resistencia debido a su profundo desconsuelo. Con todo, notó que su sentimiento de culpabilidad había remitido notablemente. Cuanto menos, podía respirar sin dificultades y conciliar el sueño.
Por supuesto, siempre es preferible alcanzar deliberadamente un mejor estado de ánimo. Pero incluso, como en este caso en que las emociones mejoradas fueron descubiertas de modo natural e inconsciente, cada mejoría te da acceso a un estado de ánimo mejor que el anterior.
Cuando hayas comprobado que la ira y la culpabilidad te proporcionan una sensación de alivio de las abrumadoras emociones de impotencia y desconsuelo, podrás ascender más rápidamente por la escala vibratoria. Y aunque es posible que te lleve un par de días superar un nivel vibratorio, de (22) Desconsuelo a (21) Remordimientos a (18) Venganza a (17) Ira a (15) Culpabilidad, podrás recuperar tu conexión con tu Fuente y tu sentimiento de poder personal en un plazo mucho más breve de lo que nadie pueda imaginar.
He aquí un ejemplo de unas frases conscientes que esta mujer pudo haber pronunciado para mejorar su estado de ánimo:
Hice cuanto pude para ayudar a mi padre, pero no bastó.
(Desconsuelo)
Le echo mucho de menos. No soporto haberle perdido.
(Desconsuelo)
¿Cómo podré consolar a mi madre?
(Desesperación)
Cada mañana, cuando me despierto, lo primero que pienso es que mi padre ha muerto.
(Desconsuelo)
No debí irme a casa para darme una ducha.
(Culpabilidad)
Debí permanecer a su cabecera para poder despedirme de él.
(Culpabilidad)
Debí darme cuenta de que estaba a punto de morir.
(Culpabilidad)
Estuve junto a mi padre día y noche, día y noche, pero no pude despedirme de él.
(Rabia)
La mujer que estaba con él sabía muy bien lo que estaba sucediendo.
(Rabia)
¿Qué sentiría esa mujer si hubiera sido su padre el que estaba enfermo y yo le hubiera inducido el coma?
(Venganza)
Esa mujer ha visto morir a muchas personas, y debió advertir-me de que mi padre estaba a punto de morir.
(Ira)
Creo que ella lo sabía y no quería que yo estuviera presente.
(Ira)
Administró a mi padre una dosis mayor de lo necesario para no tener que preocuparse de él.
(Culpabilidad)
Ojala hubiera podido despedirme de él.
(Decepción)
Hay muchos detalles que hay que tener en cuenta, y no me siento con ánimos para nada. (Agobio)
He descuidado muchas cosas en mi vida; necesito serenarme y organizarme.
(Agobio)
Los profesionales sanitarios se muestran insensibles a las familias de las personas enfermas y moribundas.
(Frustración)
Les preocupa más recoger las botellas de oxígeno que mis senti-mientos.
(Irritación)
Me sentará bien pasar más tiempo con mi familia.
(Esperanza)
Me convendría retomar el ritmo normal de mi trabajo.
(Expectativas Positivas)
Sé que dentro de un tiempo me sentiré mejor.
(Expectativas Positivas)
No sé si volveré a sentirme como me sentía antes, pero sí que con el tiempo me sentiré mejor.
(Expectativas Positivas)
Hay muchas cosas que hacer, muchas cosas que deseo hacer.
(Expectativas Positivas)
Tengo ganas de sonreír sinceramente y de reírme a gusto.
(Expectativas Positivas)
Aprecio mucho a mi marido. Me ha ayudado en muchos aspectos.
(Apreciación)
Aprecio a todas las personas que han atendido a mi padre y a mi madre.
(Apreciación)
Aprecio a mis hermanas. Todas queremos a nuestros padres, y nos queremos nosotras.
(Apreciación) (Amor)
Bien pensado, hemos vivido y vivimos vidas maravillosas.
(Apreciación) (Amor)
La muerte forma parte de la vida.
(Conocimiento)
Puesto que somos Seres Eternos, la «muerte» no existe.
(Conocimiento)
Papá no ha muerto, porque la muerte no existe.
(Conocimiento)
Mi padre está en un lugar donde no existe la tristeza.
(Conocimiento)
Es un lugar maravilloso.
(Alegría)
Me encanta saber que mi padre está en un lugar en el que reina la alegría y la comprensión.
(Alegría)
Adoro esta gloriosa experiencia en la Tierra.
(Alegría)
Me encanta saber que todo encaja.
(Alegría)
Me encanta haber tenido a un hombre tan maravilloso como padre.
(Alegría)
Ha sido una experiencia magnífica.
(Alegría)
Es una experiencia magnífica.
(Alegría)
Recuerda que no tienes acceso a las emociones que estén ale-jadas de tu presente situación vibratoria. Aunque pases un día en-tero regodeándote en tu presente emoción, al día siguiente pro-cura establecer un punto fijo distinto, aunque sólo represente una ligera mejoría.
Si la emoción negativa que sientes es leve, ascenderás rápida-mente por la escala emocional. Si la emoción negativa que sientes ha comenzado hace poco, ascenderás rápidamente por la escala emocional. Si experimentas un estado de ánimo grave o llevas conviviendo con él desde hace muchos años, es posible que tardes veintidós días en ascender por la escala emocional, a medida que elijas deliberadamente una emoción mejor con respecto a la que sientes en esos momentos. Pero veintidós días para pasar de la «Impotencia» al «Poder personal» no es mucho tiempo comparado con las personas que sabes que han permanecido sumidas muchos años en un estado de «Desconsuelo», «Inseguridad» o «Impotencia».
Ahora que comprendes que tu meta es alcanzar una emoción más placentera, confiamos en que este proceso te ayude a liberar-te de la preocupante emoción negativa que has experimentado durante años. Y cuando consigas liberarte suave y progresivamente de la resistencia que has acumulado sin darte cuenta, comenzarás a experimentar numerosas mejoras en tu experiencia vital, en todos los ámbitos de tu vida que te preocupaban.